El 27 de mayo, la Comisión Europea presentó las esperadas propuestas del Plan de Recuperación Económica, denominado en inglés Next Generation EU, para hacer frente al grave impacto económico de la COVID-19.
En síntesis, el paquete de medidas está integrado por:
- Dos comunicaciones sobre el Fondo de Recuperación y el Marco Financiero Plurianual 2021-2027 revisado;
- Un documento de trabajo para identificar las necesidades de recuperación europea;
- El Programa de Trabajo 2020 actualizado, acompañado de un anexo con el calendario previsto de las próximas iniciativas legislativas y no legislativas para este año.
La Comisión Europea propone que el nuevo instrumento de financiación esté dotado con 750.000 millones de euros, que será financiado a través de emisión de deuda. De dichos 750.000 millones, 500.000 millones se asignarán enforma de ayudas; y 250.000 millones de euros vía préstamos a los Estados miembros.
El Plan está centrado en tres pilares:
- Un primer pilar de inversiones y reformas divido en un Fondo de Resistencia y Recuperación (560.000 millones de euros); y un complemento denominado React-EU (55.000 millones de euros).
- Un segundo pilar de reactivación de la economía, integrado por dos fondos: un Instrumento de Apoyo a la Solvencia (31.000 millones de euro), destinado a las empresas en las regiones más afectadas por el Covid-19; y un nuevo Fondo de Inversión Estratégica (15.000 millones de euros). Además, en este pilar se integra la actualización del Programa InvestEU.
- Un tercer pilar enfocado a las lecciones aprendidas tras la crisis, que integra, entre otros, un nuevo programa de salud (EU4Health), que contará con un presupuesto de 9.400 millones), y un refuerzo del programa Horizonte Europa (94.400 millones de euros).
El próximo paso es la negociación de dicho Plan con y entre los Estados miembros, siendo el Consejo Europeo de 19 de junio la siguiente cita importante para lograr su aprobación en tiempo y forma.